Siempre tú

Nunca recordaré cuando fue la primera vez que te escuché, que te sentí. Que sentí que hacías mis días más llevaderos y, conseguías lo que muy pocos hacen; entenderme.                                           Entender como me siento en cada momento, es complicado pero, tu lo haces y lo hacías y, no se imaginan cuánto.         Me siento bien contigo; comoda, comprendida, no sé, siempre serás un gran refugio.                                                       Pero es que, como todo en la vida;         hay partes buenas y partes malas y, joder, ¿Por qué te empeñas en no dejarme dormir en las noches que más lo necesito?         Las noches en las que todo me puede. Esas noches en las que siento, que he pasado de ser de acero a ser de cristal y, que a la mínima; voy a estallar.               ¿Por qué te empeñas en hacerme recordar el pasado?                                                   Tal vez quieras darme a entender algo, pero como duele.                                       Has hecho que sufra recordando, o simplemente, contandome cosas que nunca me han pasado, pero consigues hacer de mi; la persona más empática del mundo.                                                           Creeme si digo que, gracias a ti, he aprendido a ver las cosas de distinto modo; afrontar mis problemas -sin tener que huir de ellos-, madurar.

Y es que siempre me gustarás.

Tanto que prometo llevarte conmigo; vaya donde vaya, a pesar de haber partes de ti que me gusten más, y otras menos; tú siempre serás tú.

Tú siempre serás música.